La diversidad es una condición inherente a lo humano. Es deber de las instituciones educativas reconocerla y asumirla, para propiciar el desarrollo de cada niño como ser único, con las características que lo identifican.
La diversidad es una condición inherente a lo humano. Es deber de las instituciones educativas reconocerla y asumirla, para propiciar el desarrollo de cada niño como ser único, con las características que lo identifican.